LA COLADA

La Colada
se levanta sobre el cielo
y del sol sale esa espada
sobre yelmos desplomada.
Se hunde en mora piel
esa cascada
a liberar latidos moros
por remolinos de la nada.

La Colada recorre el horizonte, avanza
Por cabeza negros ojos
del cuello cercenados
quedan parpadeando
como líquidos, cegados.

La Colada bien blandida
va cortando yelmo,
va cortando almófar,
va cortando cofia.
La nasal se abre en dos.
De un solo tajo
cortando las moncluras
vuelan por los aires los rubíes
de los muertos marroquíes.

La Colada se clava

en la montura de Yusef

y es canción de gesta

arco iris sin sentido
esa mentada de adalid.

Goza la buena gente de la guerra
Las hermosas tiendas evacuadas
con bucles de oro adornadas
y mil caballos excelentes
con sus sillas, palafrenes
y sus espadas acopiadas.

¡Somos en ti, Campeador!